La empresa Americana WooWee, creadora del archifamoso Robosapien, ha decidido crear una nueva división para fabricar robots “serios” y hacernos así la vida más facil. Su primera apuesta se llama Rovio, y se trata de un robot de telepresencia con conexión wi-fi con el que podremos estar en dos sitios a la vez.
La idea desde luego es llamativa así que no nos lo pensamos dos veces y nos subirnos al carro de las nuevas tecnologías, así ya de paso vigilamos nuestra casa o vemos a nuestros parientes mientras duermen o ven la tele.
Lo primero de todo es comprar uno, eso no requiere mucho esfuerzo y en 48 horas lo tengo en casa por el módico precio de 300 Eurazos. Viene todo en una bonita caja perfectamente protegida con sus drivers, su manual y su garantía.
Lo primero que me llama la atención es que junto con el CD de drivers viene una nota IMPORTANTE diciendo que no utilicemos el CD de drivers, que lo mejor es que nos bajemos los drivers de internet que estarán más actualizados.
Bueno, no pasa nada, nos metemos en la web y nos bajamos los drivers… ahh y el nuevo firmware ….. andaaaa y el instalador del firmware… madre mía que cantidad de cosas sólo para un cacharro que anda por casa.
Bueno, pues 45 minutos despues ya lo tengo todo instalado y configurado tal y como indican las instrucciones; he instalado el software, actualizado el firmware, instalado la batería y colocado la base de carga tal y como recomiendan en las instrucciones (Resulta que para que Rovio encuentre su base de carga esta tiene una pareja de lasers que deben estar apuntados al centro del techo de la habitación).
En cuanto al robot, el diseño es atractivo, con líneas rectas y un acabado muy moderno. Podría formar parte de alguna peli de animación por ordenador, haciendo de mascota graciosa :P. La base de carga tiene un diseño totalmente espacial, con una especie de proyector que ilumina el techo.
De esa forma, si no nos gusta el robot, al menos lo podemos usar de nave espacial de pega.
Cuando está funcionando tiene varias luces azules encendidas, y lo más importante es que cuando hay alguien conectado remotamente, una luz roja se enciende en la parte superior; esto es importante para saber si tenemos a un hacker espiandonos.
Para empezar lo he probado en casa utilizando la red local y se maneja muy bien. Las ruedas permiten movimientos ágiles y la comunicación y calidad de imagen es competente.
Una de las cosas que más me gustan es poder mover la cámara integrada en sus tres posiciones, siendo una de ellas una vista hacia el techo con la que podemos ver la cara de la persona con la que hablamos.
Una de las características de Rovio es que no solamente podemos ver lo que ocurre a través de su cámara si no que además podemos hablar y escuchar lo que ocurre remotamente. Esto está muy bien para poder charlar con la familia cuando no estamos 😀
Como utilizarlo en casa no tiene ninguna utilidad me dispongo a probarlo desde la oficina para sacarle todo el partido a mi nuevo robotito. Hasta aquí llega lo bueno del robot porque configurarlo para poder conectarme desde un ordenador, pda, o lo que sea que este fuera de mi red local supone un verdadero infierno.
Para empezar en el manual no pone nada, el router dice que pasa de mi, en los foros dice que tengo que abrir un puerto del router y que lo tengo que redireccionar a no se donde. ¡¡Resulta que el robot sólo viene listo para funcionar en una red local!!, ¡¡pero como es posible!!, si se supone que es de telepresencia, para que $%&!! quiero que funcione en red local? para eso me levanto y hablo con quien sea.
El caso es que al final y despues de mucho configurar, abrir puertos y redireccionar cosas consigo que funcione. La calidad no es mala y responde bastante bien pero resulta que no veo nada porque la luz de la habitación está apagada en ese momento; no pasa nada, el robot tiene una luz LED que me permitirá ver algo y poder moverme a una zona iluminada (o eso pensaba yo).
Le doy a la lucecita yyyy…….. ¿nada?, parece que no funciona así que le vuelvo a dar y espero…… nada. Cuando vuelvo hago la misma comprobación estando en la misma habitación y me llevo otra decepción 🙁 resulta que la luz si que se ilumina pero es como si enciendo una cerilla en un estadio, no vale para nada.
El software del robot tiene muchas configuraciones pero no valen de nada si
1.- No puedo conectarme de forma remota y
2.- tengo que dejar las luces encendidas para poder ver algo. La verdad es que estoy muy decepcionado con este robot, parecía una gran compra y una gran idea la de estar en dos sitios a la vez, poder hablar y escuchar lo que se dice. Pero siendo prácticos, no vale para nada.
Y si a eso añadimos que cada vez que apago el router y me cambia la IP tengo que volver a averiguar la que me han dado para conectarme, apaga y vamonos.
Lo último que me quedaba por probar era la navegación automática. Como no vienen balizas de serie lo único que puedo probar es la autorecarga. La idea de poner unos lasers para que el robot los vea y se guie hasta la base me parece algo rebuscada pero una vez que lo pruebo parece que funciona, eso si, en una zona completamente despejada.
Si intento poner la base debajo de un mueble o cerca de una mesa el resultado es que no entra nunca, pero si lo pongo en una zona amplia, entrará sin problemas (siempre que los lasers estén bien puestos).
Conclusión:
Rovio parte de una idea muy buena, pero se nota que no se ha dedicado suficiente tiempo a desarrollarla. El diseño es bueno pero la utilidad es nula, a menos que queramos tener una mascota futurista en casa o espiar al vecino.
Si además le añadimos que para sacarle todo el partido hay que tener conocimientos avanzados de redes e informática, lo mejor es hacer lo que he hecho yo, tenerlo como mascota para entretener a los niños.
Puntuación: | |
Diseño: | 8 |
Navegación manual: | 7 |
Navegación automática: | 3 |
Utilidad: | 1 |
Facilidad de uso: | 2 |
Media: | 4,2 |